Abogado laboralista en Almonacid de la Cuba
¿Su arreglo laboral no está atravesando óptimos momentos? Recuerde que en cualquier oportunidad sin atañer el tipo de convenio que el operario firmase con el director, éste puede irrumpir dicho acuerdo laboral cuando lo crea oportuno. Simplemente dos cositas a memorizar :
-No puede desatender su recinto de trabajo sin previamente anunciarlo al amo y
-Que la medida tomada por el trabajador sea completamente individualista y voluntaria sin que el director haya tomado parte.
Si el empresario por diversos motivos impusisese al proletario a aprobar la baja voluntaria el asalariado siempre deberá de desistir tal situación y bajo ningún concepto firmar, además tampoco el trabajador deberá de precisar la baja voluntariamente aún si las cercanías personales no sean tan calurosas como anteriormente o se haya producido algún impago en cierta nómina. Existen otras maneras legales de solventar tal estado y así el jornalero no tenga problemas a la hora de poder obtener la ayuda conveniente y poder solicitar el paro.
La información la realizará el jornalero a la fábrica mediante una misiva y siempre con copia. Una de las reproducciones será entregada al director y otra para el asalariado la cuál primero habrá sido acuñada por la fábrica. Si el amo se negase a visarla por cualquier principio, el operario puede tramitarla mediante burofax.
La notificación será transmitida a la empresa por parte del trabajador, exceptuando que este se encontrase en la la etapa de prueba, con el preaviso correspondiente que manda el Convenio Colectivo o talvez en su día se concertase al firmar el documento de trabajo. Si por algún imprevisto no existiese un plazo de previo aviso ni en el convenio o no se hubiese pactado anteriormente en el pacto admitiremos lo que decide el Estatuto de los Trabajares que son 15 días.
Ya se sabe que, si el productor no cumple con la fase de preaviso, el empresario puede descontarle del finiquito los días que falten del preaviso o todavía hasta reclamárselos, en el presunto caso en los que la deducción supere a la recompensa.
El jornalero no tendría que pasar por alto que puede echarse para atrás con la baja voluntaria quepropuso aunque se hallase en el período de preaviso ya que el contrato laboral, entre jornalero y empresario, sigue siendo válido.
Al concluir el trabajo la fábrica deberá de entregar al asalariado la supuesta liquidación final correspondiente a la baja. Si el trabajador por diversos motivos estuviese contrariado tendrá que rubricarlo sellarlo y poner no conforme. Si sucediese todo esto el productor quedaría exento de ingresar su paga aunque si puede pedir lo que el empresario le tiene que ingresar.